Preparar codillos frescos para luego hacerlos al horno, a la barbacoa, etc...es bien fácil.
Son mucho más baratos que comprarlos en salmuera y una vez hechos podemos congelarlos en su caldo y usarlos cuando nos convenga. Yo lo hago de uno en uno y eso solo sacar, descongelar y hornear o hacer como más nos guste.
Para elaborarlo lo ponemos todo en la olla, cubrimos de agua y lo tenemos a fuego medio algo durante una hora.
Cuando esté hirviendo bajamos un poco el fuego pero hirviendo a fuego moderado.
Comprobamos sacando uno y pinchándolo para que veamos si está blandito, yo estos los tuve una hora veinte minutos, eran grandecitos, los hay más pequeños.
Eso es todo, así de fácil.
Si queremos ir más rápido todavía cerramos la olla y calculamos entre media hora o un poco más, abridla y comporbadlo, pero estarán hechos. Pensad que luego irán al horno por unos 30 minutos o un poco más, hasta que estén dorados y la guarnición que escojamos hecha.
Solo nos queda sacarlos y al horno o congelarlos en este increíble caldo blanco uno por uno para luego sacar las piezas que queramos.
Este caldo nos sirve estupendamente para cualquier otro guiso, como unas lentejas o alubias, etc... y también para cuando los hagamos al horno, con coñac y verduras por ejemplo.
Hola guapa, mira que hace tiempo que no como codillo y al ver estos tuyos tan ricamente cocinados y me han entrado unas ganas locas de comerlos. Tu receta me ha servido de mucho, la guardo con esmero. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola bombón!! Hace tiempo estuvimos comentando sobre los codillos de Ikea, recuerdas? Pues aunque son recetas distintas, yo que me quedo con estos, sin duda!
ResponderEliminarBesitosss