Si hay algo que se hace rápido y es super fácil son las QUICHES.
Las podemos rellenar de lo que nos guste o tengamos en la nevera, se adaptan a cualquier gusto y bolsillo.
Las podemos comer en el campo, en la playa, en la oficina o por la calle , si es que vamos, que nos solucionan más de una comida, cena o merienda.
Esta la he hecho con lo que tenía en la nevera.
INGREDIENTES:
- Una cebolla picada.
- Medio calabacín partido en rodajas.
- Dos o tres tomates a rodajas.
- 100 gramos de jamón de York o dulce ( lo podéis sustituir por bacon, panceta, serrano, lo que tengáis a mano)
- Tres huevos.
- 300 ml de leche evaporada. (últimamente huyo de las natas)
- Dos cucharadas soperas rasas de aceite de oliva o mantequilla.
- 100 gramos de queso rallado.
- Una lámina de masa quebrada. ( En este caso comprada del super)
- Sal y pimienta negra molida.
ELABORACIÓN:
Lo primero es hornear la masa quebrada.
Precalentamos el horno a 180 grados.
La sacamos del envoltorio, con su papel y todo la disponemos en el molde, acoplándola a las paredes con los dedos.
Hay que dejarla un poco más alta que las paredes del molde porque encoge al hornearla.ç
Fijaos en el tamaño de la masa para escoger el molde adecuado.
Fijaos en el tamaño de la masa para escoger el molde adecuado.
Pinchamos con un tenedor la pasta para que no hinche y ponemos otro papel de hornear encima y sobre este otro molde para que haga peso, o garbanzos que tendremos solo para esto o venden unas bolas de cerámica para tal uso. Yo no tengo esas bolas y en este momento tampoco garbanzos, así que puse un molde casi del mismo tamaño que el de abajo .
Horneamos a 180º durante 15- 20 minutos. Se me paso un poco el tiempo y se me tostó demasiado, pero bueno.
Veis como ha encogido un poco la masa?
Da igual, está igual de buena.
Vamos a por el relleno.
En una sartén con una cucharada de aceite o un poco de mantequilla pochamos la cebolla con sal y pimienta.
Si en vez de jamón de york le queréis poner bacon es el momento, así se dorará a la vez.
Mientras se dora, separamos a un lado de la sartén y en la otra mitad doramos los calabacines ( echarle también un poco de sal y pimienta).
Picamos el jamón de york.
En un bol batimos los huevos, añadimos la leche evaporada, el frito de cebolla, el jamón de york picado y el queso rallado si os gusta con un poco más de sal y pimienta.
Mejor id probando para que no nos pasemos con la sal.
Echamos esta mezcla a la masa quebrada que ya tenemos horneada.
Disponemos encima de ella el calabacín, que quede bien repartido.
Partimos los tomates a rodajas y los repartimos también sobre el relleno, que queden intercalados con el calabacín..
Introducimos en el horno que seguimos teniendo precalentado a 180 grados y horneamos hasta que cuaje.
Sabremos que está hecho cuando al meter un palillo en el relleno este sale seco.
Meterlo hacía el centro de la quiche, es lo que más tarda en cuajar.
Sobre 15 ó 20 minutos suele ser suficiente, pero mejor hacer la prueba del palillo, es infalible.
Ya veis , dorada y divina.
Os va a sacar de más de un apuro y hasta para una ocasión especial, rellenandolas con salmón, gambas, espárragos...etc..o haciéndolas con tamaño individual.
¿Os apetece un trocito?
No hay mas que verla para entrarme unas ganas que no veas huuuuu.Buenas noches
ResponderEliminarTiene una pinta espectacular!!!!
ResponderEliminarUna pinta espectacular guapa. TE ha quedado de lujo. Un besazo.
ResponderEliminarVaya pintaza! Buena forma de cocer en blanco la masa, por cierto!
ResponderEliminarUmmmm que buena!!! Te ha quedado riquísima.
ResponderEliminarBesoss