Este es uno de los panes más fáciles de hacer, con harina panificable que podemos encontrar en cualquier supermercado y al que le hemos añadido semillas, nueces y ciruelas secas, que le aportan sabor y no pocos beneficios para la salud.
Podemos hacer un pan de medio kilo como es este caso o dividirlo en porciones donde nos saldrán de 5 a 7 dependiendo del tamaño que queramos y de la forma que escojamos.
A mi me gusta más así porque por las mañanas una buena rebanada junto con un café o infusión y un zumo tenemos un desayuno perfecto.
Vamos con la receta.
INGREDIENTES:
- Medio kilo de harina panificable, en mi caso Harina Rústica del Lidl.
- 10 gramos de sal.
- 5 gramos de levadura de panadero. (Suelo comprarla en Mercadona)
- 300 ml de agua.
Para incorporar cuando tengamos hecha la masa he puesto:
- Ocho o diez ciruelas secas quitándole el hueso.
- Un puñado de semillas, nueces y frutas deshidratadas. (Compro una mezcla en el Mercado Central de Alicante que venden al peso), también lo encontraremos en supermercados y herbolarios.
ELABORACIÓN:
Disolvemos en el agua apenas tibia la levadura e incorporamos la harina y la sal.
Amasamos a mano o si tenemos robot con las varillas de amasar.
Hay que amasar hasta los ingredientes se unan, si lo hacemos con máquina veremos que llega un momento que tenemos que seguir a mano.
Pondremos un poco de harina en la encimera de la cocina y amasaremos hasta formar un bola.quedando la masa elástica.
Metemos la masa en el bol y cubrimos con un paño o film de cocina.
Reservamos en un lugar cálido de la cocina, yo suelo calentar el horno a 50 grados, apagarlo y lo metemos, ese calor es suficiente para que leve adecuadamente.
Aquí la vemos, comprobamos que ha doblado de volumen, al lado la harina que he usado.
Estiramos la bola con el rodillo y esparcimos las semillas, nueces y ciruelas secas sin hueso por encima.
Podéis escoger lo que más os guste para el relleno o simplemente no poner nada.
Doblamos la masa hacia adentro hasta formar una bola, no pasa nada si algo de la fruta quedan en los bordes, con que esté tapado con una fina capa masa por encima para que no se requeme con el calor del horno es suficiente.
Una vez tengamos formada la bola de nuevo la ponemos con papel de horno o parafinado en un recipiente. El horno lo estará precalentado a 200 grados.
Espolvoreamos por encima de la masa harina para que así al crecer se vean dos colores, el blanco de la harina y el tostado del pan. Esto es optativo pero queda más bonito.
Con un cuchillo afilado le hacemos unos cortes que le dará una forma más apetecible.
Volvemos a meter al horno con una temperatura cálida, igual que en el primer levado, no se os olvide que el horno ha de estar apagado..
En unos tres cuartos de hora o una hora la masa ha duplicado su volumen.
Si la temperatura que tenemos en la cocina es fría la masa subirá pero tardará mucho más tiempo.
Pasada una hora ha levado al doble de su tamaño y está listo para hornear.
Calentamos el horno a 200 grados y ponemos un bol con agua en el suelo del horno.
El vapor que produzca el agua hará más crujiente la corteza del pan.
Horneamos durante 45 minutos a 200 grados.
Sabremos si el pan está cocido si al golpearlo con los nudillos de la mano lo notamos hueco, el ruido que produce es inconfundible.
Sacamos y dejamos enfriar en una rejilla.
Aquí tenéis el corte del pan, donde se ven las ciruelas secas y el resto de ingredientes que iremos encontrando conforme se vayan partiendo las rebanadas.
Si optamos por hacer bollos o barritas pequeñas el tiempo de cocción será de unos 15 ó 20 minutos.
Acordaos de comprobar golpeando el pan para saber si está bien cocido.
Espero que os haya gustado la receta. Es un pan que podemos tener hecho en una mañana y nos sacará de más de un apuro, os lo aseguro.
Fuente de la receta: Libro del PAN de Xabier Barriga. Editorial Gijalbo.
Vaya pinta. Me comería un trozo ahora mismito con un poquito de jamón! Enhorabuena por el blog, que recetas más chulas tienes.
ResponderEliminarYo acabo de hacer un blog y soy una novata, pero te lo dejo por si quieres echarle un vistazo o darme algún consejito.
https://justfoodlovers.wordpress.com/
Menuda pinta,tiene este pan,si me da un trozo yo pongo la,mermelada eh...un besito!!
ResponderEliminarMenuda pinta,tiene este pan,si me da un trozo yo pongo la,mermelada eh...un besito!!
ResponderEliminarMe encanta el pan, tiene una pinta... ufff... además ese olor a pan recién hecho que se queda en toda la casa... este fin de semana hago pan... me ha entrado mono!!!
ResponderEliminarMadre del amor hermoso, que bueno tiene que estar este pan, no te digo ná pero te lo digo tó, ya sabes lo que tienes que hacer. jiijiji
ResponderEliminarUn besote grande grande, mi querida amiga.
Un pan muy apetecible con todos esos ingredientes extras que le has puesto :) me ha gustado mucho! Un beso
ResponderEliminarrecetas de una gatita enamorada
En tiempos solía tener esas harinas para hacer pan en emergencias, cuando no me daba tiempo a nada más... me parecen apañadísimas, y dan panes muy aceptables para el poco trabajo que dan... te ha quedado estupendo este.
ResponderEliminarEsas harinas están genial, la calidad del pan que generan es muy buena para los tiempos de levado que conllevan. Se ve una miga tierna y esponjosa y el añadirle ciruelas, nueces y semillas les da un punto extra. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarMenuda pintaza tiene este pan y con esos frutos secos muy sano e ideal para el transito intestinal. Un besazo.
ResponderEliminarQue receta mas rica, me encanta muy buena presentación.MUCHOS BESOS DE LAS RECETAS TRADICIONALES DE COCINA.
ResponderEliminarte ha quedado un pan riquisimo , felcidades , la miga se ve espectacular , tomo nota de la receta, besitos
ResponderEliminarQué bien! Justo ayer compré un paquete de harina rústica de Lidl. Me la apunto, gracias! Besos.
ResponderEliminar