Esta receta es una versión del clásico salmón ahumado.
He visto muchas recetas y todas estupendas, pero vi un vídeo en un blog y me encantó como lo hacia, las explicaciones que daba y cuando lo hice y vi el resultado me sorprendió su sabor.
Este es el blog: lalocacocina.blogspot.com, os lo recomiendo.
Y su blog de pintxos, lleno de creatividad y originalidad.
El enlace lo encontráis en el primero.
Mi receta lleva algunos ingredientes más, pero de la manera que la hagáis el éxito está asegurado.
Ingredientes:
- 350gr de salmón fresco.
- 250gr de sazonador de salmón ahumado (Mercadona).
- 100gr de azúcar.
- 100gr de sal gruesa marina.
- Una cucharadita de café rasa de pimienta, blanca y negra.
- Una cucharada sopera de polvo grueso de cascara de naranja, encontráis como hacerlo AQUÍ
Preparación:
Primero comentaros que cuando destapáis el sazonador del salmón ahumado, su olor es muy fuerte y os va a parecer que va a quedar horrible, nada más lejos de la realidad.
Lo rebajaremos un poco ese gusto que luego va a quedar mezclándolo con sal gruesa marina y azúcar, aparte de los otros ingredientes.
No obstante luego cada uno tenemos nuestras preferencias y adaptamos esos ingredientes a nuestros gustos.
Ya sabéis, la imaginación, es fundamental para la cocina.
Vamos a comenzar limpiando el salmón de espinas con unas pinzas que tengáis para la cocina, no son muchas y son grandes, se quitan con mucha facilidad.
Se mezclan el resto de los ingredientes y se pone en un recipiente, yo prefiero que sea de cristal, ya que el sazonador de Mercadona hace un olor muy fuerte y si es de plástico no habrá quien quite luego el olor.
Primero ponéis una parte de la mezcla, encima el salmón y lo cubrís con el resto.
Hay que envolver el recipiente con un papel film o una bolsa para que quede hermético pero que toque el marinado, ya que luego hay que ponerle peso con cualquier brik de un litro que haya en casa, yo envuelvo también en plástico el brik , os prometo que el olor traspasa las dos bolsas al estar en contacto.
Lo dejamos dentro de la nevera sobre 24 horas .
Pasado ese tiempo se saca , se lava y se hace las lonchas que nos apetezca comer.
Así, limpio dura en la nevera una semana, bien cerrado con papel film para que no se reseque.
De todas maneras una vez hecho y con esa cantidad no suele durar más de dos días.
Como más nos gusta es solo, aunque con pan y mantequilla está buenísimo, sólo es un bocado único.
El polvo de naranja le da un toque muy suave y distinto que combina perfectamente con el sabor del salmón.